Paran labores transportistas después de ataques armados
Chilpancingo es la tercera ciudad en donde ha parado el transporte público en lo que va de 2024, después de Acapulco y Taxco
Texto: Yasmín García
Foto: Oscar Guerrero
Chilpancingo, 5 de febrero 2024
Transportistas de Chilpancingo suspendieron el servicio tras ataques armados que dejó un saldo de cuatro choferes del transporte público muertos y un herido.
El primer ataque se suscitó alrededor de las 6 de la mañana en contra del sitio de urvan “Águilas Doradas” de la ruta Chilpancingo-Chilapa, de manera simultánea otro ataque sucedió en contra de un chofer de la ruta Petaquillas-Chilpancingo en el barrio de San Francisco.
Alrededor de la 9 de mañana un taxi del servicio local fue incendiado sobre el bulevar Vicente Guerrero, el cadáver del conductor quedo calcinado al interior de la unidad.
Minutos más tarde el chofer de una Urvan de la ruta Las Torres fue asesinado a balazos.
Debido a estos ataques armados algunos sitios locales de taxis comenzaron a publicar en redes sociales que su servicio había sido suspendido.
Mientras que el transporte público de la ruta Valle del Ocotito y Tierra Colorada anunciaron que ya no ingresarían a la ciudad, realizando ascenso y descenso de pasaje en la carretea federal Chilpancingo-Acapulco, a la altura del puente de Petaquillas.
En un recorrido por la avenida Insurgentes, frente al Mercado Baltazar R. Leyva Mancilla se observó que la gente espera el transporte público para llegar a su destino, mientras que otros decidieron caminar.
Una usuaria manifestó que llevaba más de 20 minutos esperando tomar un taxi para llevarla a su domicilio ubicado en la colonia Viguri, al oriente de Chilpancingo.
“Vine a comprar al mercado, ayer no pude venir, pero no hay transporte le tuve que hablar a mi hija para que viniera por mí”, contó.
Chilpancingo es la tercera ciudad en donde el transporte público ha sido suspendido por ataques del crimen organizado en lo que va de 2024. El 16 de enero transportistas del puerto de Acapulco pararon labores después de atentados en su contra y amenazas de la delincuencia organizada.
El 21 de enero, el transporte suspendió labores en Taxco de Alarcón después del asesinato de un chofer que se negó a pagar la cuota que le exigieron criminales.
Los transportistas denunciaron en redes sociales ser obligados por la Familia Michoacana a realizar labores de “halconeo” por lo que exigieron a los tres órdenes de gobierno garantizar su seguridad.
Ante la falta de transporte público el gobierno municipal optó por ofrecer servicio de traslado gratuito en patrullas de la policía municipal y camionetas de protección civil a la población.
