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Huitziltepec, pueblo indígena que resiste en su tradición del Día de muertos

Pobladores nahuas de este pueblo aseguran que Otis es causa del cambio climático


Texto y foto: Eduardo Yener Santos

Huitziltepec, 3 de noviembre 2023

En Huiziltepec, comunidad nahua del municipio de EduardoNeri, los pobladores celebran el día de muertos de dos formas muy peculiares; colocan altares con ofrendas en medio de sus casas y, acuden al panteón durante la noche para adornar las tumbas con flores, encender velas y veladoras para convivir con los fieles difuntos.

Durante los días 1 y 2 de noviembre de cada año, los más de seis mil habitantes de Huiziltepec se preparan desde las cinco de la tarde; instalan sus ofrendas en casa, se visten con ropa nueva y se dirigen al panteón.

Niños, jóvenes, adultos y ancianos participan en esta celebración para recordar a los difuntos, llegan al camposanto para convivir con sus familiares que han fallecido.

Este año ante las pocas lluvias de temporada que traerán bajas cosechas de maíz, frijol y calabaza.

Los campesinos de Huiziltepec se siente desamparados, pero a la vez agradecidos. El huracán Otis que tocó tierra en Acapulco es otro tema que también tienen en mente.

Raúl Isidro, poblador de Huitziltepec que como cientos de sus paisanos acudieron a las tumbas esta noche, aseguró que las lluvias de este año fueron pocas en su comunidad, pero preocupa que al final pasará el huracán en Acapulco.

Afirma que lo sucedido en Acapulco es algo catastrófico, e indica que es una reacción de la madre tierra porque toda la humanidad le ha fallado al mundo y, la tierra se enoja de mucho calentamiento global.

En Acapulco les paso algo muy mal y estamos orando para nuestros hermanos del pueblo que se encontraban en Acapulco estén bien.

Si nos fue mal con la lluvia, pero a pesar de eso no debemos quejarnos porque eso es lo que decidió el creador, no nos podemos quejar porque en estos momentos nuestros hermanos de Acapulco son los que la están pasando muy mal- dijo el habitante.

Acudir al panteón de Huitziltepec durante el 1 y 2 de noviembre, días en que adornas las tumbas es vivir conocer parte de la cultura indígena de los pueblos nativos de Guerrero, quienes creen que la muerte es parte de la vida.

Su cosmovisión indígena es que sus familiares que han muerto, no han dejado de existir porque siempre los tienen presentes en la vida y, ahora solo habitan en las tumbas como su nuevo hogar.

La señora Eusebia Bautista, una de las mujeres adulta mayor que aún conserva su lengua materna el náhuatl, indicó que ella prefiere quedarse en casa con su altar porque caminar al panteón es cansado.

Manifestó que este año en Huitziltepec el precio de la flor se elevó al doble que el año pasado, por eso ella prefirió cortar flores silvestres como el pericón, porque su difunto esposo y su padre que también ha fallecido no le agradarían esas flores caras y de racimos delgados porque no tiene el olor a campo.