El 27 Batallón fue partícipe y cómplice de la desaparición de los 43, dicen en protesta en Iguala
A seis días de que se cumpla una década de la desaparición de los 43 normalistas, los estudiantes derriban barda con vehículo incendiado en zona militar
Emiliano Tizapa Lucena. Iguala, 20 de septiembre 2024
Fotos: Óscar Guerrero
“Esta instalación (del 27 Batallón de Infantería en Iguala) fue parte fundamental (de la desaparición de los 43) y que no ha querido entregar información y siempre negó saber nada de ese día”, reprochó Emiliano Navarrete Victoriano, padre de José Ángel Navarrete González, a una semana de cumplirse una década del caso Ayotzinapa.
En su tercer día de la jornada a una década de impunidad y de no saber el paradero de 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, normalistas y padres y madres de los desaparecidos visitaron el campo militar número 35 general de división Agustín de Iturbide, en Iguala.
Cerca de 15 autobuses arribaron a la ciudad de Iguala minutos antes de las 12 del día. Los autobuses se concentraron frente al Palacio de Justicia de Iguala, desde donde avanzaron hacía las instalaciones militares.

En un breve mitin afuera del 27 Batallón, Emiliano Navarrete lamentó que se cumpla una década de no saber dónde están sus hijos.
“Esta instalación fue parte fundamental y que no ha querido entregar información y siempre negó saber nada de ese día”.
Sostuvo que Salvador Cienfuegos, el ex secretario de la Defensa Nacional en el gobierno de Enrique Peña Nieto, era un hombre despreciable luego de que negó la participación de soldados en la desaparición de sus hijos, por lo que afirmó no podían estar orgullosos del Ejército.
Manifestó que en las instalaciones del 27 Batallón de Iguala se desaparece a las personas y se respalda por la máxima autoridad de México.
Cuestionó al presidente Andrés Manuel López Obrador, quien dijo debería agradecer al anterior sexenio haber desaparecido a sus hijos para que él ganará las elecciones en 2018.

“(El presidente López Obrador) se comprometió a esclarecer el caso, pero la voluntad se tiene que convertir en hechos reales”, aseguró.
Reprochó “quiere que le aplaudamos porque metió a Murillo Karam un ratito a la cárcel”.
Emiliano Navarrete afirmó que en lugar de coadyuvar con la investigación del paradero de sus hijos, el 27 Batallón y el Palacio de Justicia “fueron complices ese día y días después de orquestar la verdad historica”.
Tras concluir el mitin, los estudiantes lanzaron petardos hacia el 27 Batallón, y en respuesta los militares lanzaron gases lacrimógenos.

Los normalistas también lanzaron una camioneta de la empresa La Costeña hacia la barda de la zona militar, la cuál fue derrumbada, y posteriormente el vehículo incendiado. También con petardos fue incendiado un transformador de energía eléctrica.
Después de minutos de cruce de gases lacrimógenos y decenas de petardos los normalistas se retiraron.
Emiliano Navarrete, padre de unos de los 43 desaparecidos, afirmó que a una década seguirán luchando por encontrar verdad y justicia, y recalcó que su exigencia será la entrega de los 800 folios del Ejército.