Azucena Taquillo, el soporte de su familia gracias a la venta de jugos y fruta
María Azucena es una mujer trabajadora que inicia sus días desde las 4 de la mañana; tiene una hija de 19 años que estudia medicina y es su mayor orgullo
Yasmín García. Chilpancingo, 10 de mayo 2025.
“Todas las mujeres podemos lograr lo que queramos, quiénes dicen que no hay trabajo, sí lo hay, todo es cuestión de buscar la manera, somos unas guerreras, luchonas, trabajadoras, inteligentes, responsables, todo es cuestión de que proyecten algo”, dice María Azucena Taquillo Vargas, madre de familia que se dedica a la venta de fruta y jugos desde hace 30 años al sur de Chilpancingo, trabajo del que se siente muy orgullosa.
María Azucena comienza sus días a las 4 de la mañana, a esa hora se levanta y llega a su lugar de venta en la colonia Burócratas. Antes de la 5 de la mañana comienza a preparar los jugos, cócteles de fruta, yogurt y sándwich, para entregar en las oficinas de gobierno que se ubican en la zona sur de la capital.
Son las 8:20 de la mañana del miércoles 8 de mayo, Azucena llenó una canasta de plástico de color verde con negro, con cócteles de fruta, jugos de naranja, verdes y de zanahoria. Apresurada caminó por la avenida Ruffo Figueroa, entró a las oficinas centrales de la Secretaría de Salud Guerrero donde recorrió sus pasillos para vender su mercancía; minutos después salió con su canasta vacía.

Azucena está agradecida con sus clientes porque asegura, gracias a los ingresos que obtiene de su negocio ha llevado el sustento a su casa y, su hija de 19 años de edad estudia medicina.
La madre de familia también cuida de su papá, un adulto mayor que padece diabetes, gracias a los cuidados de su hija y a la alimentación que ella prepara ha logrado que se mantenga estable.
“Ya tiene casi 30 años con esa enfermedad pero gracias a Dios y a los cuidados de mi hija que se enfocó en cuidarlo y atenderlo él ahorita está estable y gracias a este bendito negocio que me ha permitido conocer a muchas personas y de las cuales yo dependo y vivo de mis clientes para poder llevar el sustento a casa”, contó.
Para María Azucena no es un obstáculo que la carrera de medicina sea una de las más costosas.

“Me da mucho gusto ver a mi hija, como ella sola se esfuerza por estudiar día con día, como dice ella la medicina mami está avanzando, a cada rato tengo que estudiar para ver qué es lo nuevo que sale”.
La hija de Azucena desea especializarse en neurocirugía para ayudar a las personas que lo necesiten. Considera que son tiempos de las mujeres y admira a la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, porque es una mujer preparada.
“Son los tiempos de las mujeres, somos mujeres, guerreras, luchonas, somos muy inteligentes, tenemos la capacidad de salir adelante y también por nuestra inteligencia, porque somos como unas hormiguitas muy trabajadoras y tenemos el gran ejemplo de la presidenta de México, no la conozco personalmente pero sé que es una persona muy inteligente porque antes de decidir el voto, me dijo mi hija vamos a ver cuáles son sus estudios, vamos a enfocarnos por la persona no por el partido”, contó.

Susy como sus clientes le dicen de cariño, se siente orgullosa de su trabajo porque le ha permitido darle estudios a su hija, además de que es un trabajo honesto.
Susy lee continuamente revistas, libros de medicina y pregunta a algunos doctores sobre qué jugos puede preparar, ya que sus clientes le piden recomendaciones porque padecen de algunas enfermedades.
“Mi papá era una persona que su glucosa la tenía cerca de 500, un día me dijo un doctor ya tenemos que dializarlo y le dije no, deme la oportunidad de mejorar su alimentación y ahora la maneja en 114 de 500 bajó, mi hija logró estabilizarlo”.
La mamá de doña Susy falleció cuando ella era una niña, sus hermanos no se encuentran en México, su anhelo es que algún día pueda reunirse toda la familia.
Este Día de las Madres, Azucena lo pasará con su hija y su papá. “Para mí es mi mayor orgullo mi hija y estar con ella no importa cómo, le digo a ella no importa, lo importante es que estemos juntos”.
Como regalo por el Día de las Madres, desea que las autoridades municipales le permitan instalar un techo en el lugar donde vende, ya en una administración municipal le otorgaron el permiso pero por falta de dinero no había podido. Actualmente el gobierno municipal se lo prohibió en el espacio donde vende ya que las personas buscan refugiarse del sol o de la lluvia.
A las mujeres les pidió no rendirse y confiar en ellas mismas, porque “somos unas guerreras, inteligentes y luchonas”.
