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Juan Velázquez, la historia de un padre que busca a su hija

En este Día del Padre, Juan Gálvez dice que la pasará “triste” como todos los días anteriores


Yasmín García. Chilpancingo, 15 de junio 2025

Foto: Oscar Guerrero

Desde el sábado 16 noviembre del año pasado, Juan Velázquez Gálvez busca a su hija Luz Esbeidy Ortiz Tornez, quien desapareció en el Mercado Baltzar R. Leyva Mancilla en Chilpancingo.

El padre buscador pertenece al Colectivo Guerrero No+ Desaparecidos, la mayoría son madres buscadoras, pero también hay tres padres que buscan a sus hijos o hijas.

Luz Esbeidy es madre de dos niños —uno de cuatro años y otro de cinco—, sin embargo, desde el año pasado están bajo custodia del DIF Guerrero porque Esbeidy fue denunciada por las autoridades por abandono.

La hija de Juan desapareció sin poder verlos, su papá piensa que la autoridades tienen que ver con su desesperación porque intentaba recuperar a sus dos hijos.

La madre de Luz Esbeidy cuidaba de los pequeños, porque ella estaba trabajando en Tijuana, pero alguien la denunció por maltrato infantil y el procurador del DIF acudió a su domicilio junto con policías estatales para llevarse a los menores. A la madre de Luz y a su hermano los acusaron de abuso infantil, ambos están presos.

“Llegan (los policías) me piden muy amables hablar con la mamá de mis hijos, cuando entran a mi casa todo cambia, me amenazan, me apuntan con una pistola, todo fue ilegal, no presentaron ningún documento, no había orden de aprensión, no había nada”, narró Juan.

Al padre de familia lo acusaron de tener un arsenal de armas en su casa, lo amenazaron y lo obligaron a firmar que la detención de su esposa e hijo fue legal, el procurador del DIF le dijo que él podía hacer con los menores de edad lo que quisiera, regalarlos o venderlos.

“Es algo terrible, me pongo a pensar en muchas cosas y ya no sé ni en qué pensar, mi hija antes de eso estaba peleando por sus hijos que se los llevó el DIF, el procurador del DIF no le permitía ver a sus hijos solo porque ellos quisieron, ella trabajaba y por eso la madre de mis hijos cuidaba de ellos, yo creo que dejarle sus hijos a su madre no era malo, el DIF la acusó de abandono”, lamentó.

Juan también desconfía de la ex suegra de Luz Esbeidy, quien la amenazó en varias ocasiones y peleó por la custodia de los dos menores, a las autoridades les ha pedido que la investiguen pero han hecho caso omiso.

“En varias ocasiones he ido a algunas dependencias para ver si pueden investigar a la señora Miryam, pero hasta ahorita no he sabido nada, no hay una respuesta positiva, quizás de que yo no les he ofrecido dinero. La señora Miryam es ex suegra de mi hija vive en Tecpan de Galeana, a mi hija la amenazó en varias ocasiones y se que ha ofrecido dinero a las autoridades”, denunció.

El padre buscador ha recurrido a la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) que preside Cecilia Narciso Gaytán para pedir su intervención ante el DIF Estatal para que pueda ver a sus nietos, su hija también acudió antes de desaparecer a la dependencia para pedir ayuda, pero le dijeron que no podían hacer nada.

Juan confiesa que ha pensado en suicidarse, por no tener a su familia y no saber del paradero de su hija.

“En mi casa he llorado todas las noches, porque ha sido muy difícil que de repente toda mi familia ya no esté y que mi hija desapareciera. Llegó a mi casa y es algo muy triste, veo los juguetes de mis nietos, las cosas de mi hija, todo es soledad, siento que nadie me escucha y ya no confío en las autoridades por todo lo que ha pasado, me pongo a pensar si me suicidó todo se acabaría, mis problemas y si lo he pensado muchas veces”.

Sus hermanos y hermanas de Juan lo animan a seguir luchando. Juan cuenta que ha buscado abogados para el caso de sus nietos, le piden 500 mil pesos, le aseguran que es un caso muy fácil de ganar por las irregularidades de las autoridades, pero no tiene esa cantidad de dinero.

El padre de familia trata de tranquilizarse y mantener viva la esperanza de encontrar a su hija.

“No sé que tanto pueda aguantar con esto porque si ha estado muy difícil para mí. Como digo no sé qué tanto pueda aguantar, si me doy por vencido no encuentro una salida, una solución y para tirarme al vicio pues no, nunca me ha gustado eso, no puedo hacer eso”.

El padre buscador ha acudido ha búsquedas en campo con el colectivo aunque no puede asistir con frecuencia por su trabajo.

“Voy a tratar de tranquilizarme, de ocupar mi mente en cosas productivas porque sí necesito tranquilidad, me he sentido enfermo, he perdido peso por lo mismo y ojalá mi hija aparezca, tengo algo de esperanza de que ella aparezca”.

En este día del padre Juan Gálvez dice que lo pasará “triste” como todos los días anteriores desde que su hija desapareció; “ni me acordaba que era el día del padre”.

Juan asegura que seguirá en la búsqueda de su hija y a las autoridades les pidió hacer su trabajo y no bloquearlo en el caso de sus nietos.

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