El guamúchil en cáscara o en yolitos es el sustento de muchas familias guerrerenses
Texto: Yasmín García Chino
Foto: Oscar Guerrero
Chilpancingo, 10 de abril 2023
Con cáscara o sin cáscara los “yolitos” en color blanco y rojo forman parte de la fruta de la temporada de secas que los guerrerenses consumen, en las diferentes localidades las familias tienen en su patio uno o varios árboles de guamúchil, con un “chicol” cortan las roscas que más pueden, ya sea para su consumo o para venderlas en la ciudad capital #Chilpancingo.
Con su mandil en colores llamativos, y sus camisas de manga larga para cubrirse de los rayos del sol, la señora Martha y Norma, ofrecen por almud, cuartillo y litro el guamúchil cortado de los grandes arboles de San Miguel y San Martín, pertenecientes al municipio de Mochitlán.
Con costalillas llenas del guamúchil en cáscara las señoras de Mochitlán llegan a las 6 de la mañana a la calle 21 de marzo aledaña al mercado Baltazar R. Leyva Mancilla para ganar lugar y tratar de vender los más de 13 almudes que traen cargando, a las 10:30 de la mañana personal de gobernación les pedirá que desalojen los dos metros que abarcaban sus costalillas y sus canastos, metros por lo que les cobraron una cuota.
Mientras grita “Lleve el guamúchil, bien dulce”, la señora Martha del pueblo de San Miguel relata que el guamúchil tiene propiedades curativas, sus yolitos ayudan a disminuir enfermedades del estómago como la disentería y su cáscara sirve como té.
En las secas acude a Chilpancingo a vender el guamúchil así lo ha hecho desde que tenía 15 años, actualmente tiene 50 y considera que el poder vender este fruto es una bendición.
Es el medio día, el sol está en su máximo esplendor, ha vendido ya algunos cuartillos, se retirará a las 3 de la tarde, anda cambiándose de lugar entre el tumulto de gente, porque gobernación municipal ya no la deja instalarse en un solo espacio, menciona que le gustaría que a los vendedores de temporada les permitieran vender más tiempo.
“Me gustaría que nos dejaran vender mas tiempo porque nadamas nos andan quitando y así no se puede, pero confió en el señor que voy a terminar mis 13 almudes”.
La misma petición a las autoridades la hace la señora Norma, ya que es el sustento de su hogar.
Doña Norma recuerda que de niña su mamá le decía que si alguien le lanzaba las semillas del guamúchil en la cara le saldrían lunares.
En mayo terminará la temporada de secas y con ella los guamúchiles, será hasta el próximo año que lo guerrerenses volverán a comerlos, en “yolitos” frescos o secos, como más les gusten.
