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Alerta Centro Morelos el riesgo para víctimas de desplazamiento forzado deportadas de Estados Unidos

El Centro Morelos llama a la gobernadora Evelyn Salgado Pineda y a la presidenta de la República, Claudia Sheinbaum Pardo a tomar medidas concretas para evitar nuevos desplazamientos forzados y garantizar una vida digna a quienes han tenido que huir de la violencia


Itzel Urieta. Chilpancingo, 29 de enero 2025.

Foto: Arturo de Dios

El Centro de Derechos Humanos José María Morelos y Pavón informó que las políticas migratorias implementadas por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afectarán a los desplazados por la violencia originarios de Guerrero.

En un comunicado, el Centro Morelos externó su preocupación por las víctimas de desplazamiento forzado, quienes no pueden regresar a sus comunidades por la situación de violencia y por la falta de políticas públicas por parte del gobierno federal y estatal para atender a los repatriados.

De acuerdo con el Centro Morelos, dan acompañamiento a 290 desplazados, entre esas 290 personas, hay 82 niñas y niños en riesgo de deportación.

El colectivo Desaparecidos de la Costa y Feminicidios en Michoacán (DECOFEM) reportó 300 víctimas de desplazamiento forzado.

“No sabemos hasta dónde las autoridades mexicanas estén preparadas para recibir a cientos de personas que puedan ser deportadas de los Estados Unidos, si ni siquiera han podido atender a todos los afectados por el huracán John mientras que el gobierno no cumple ni hace cumplir el derecho a la vida, el derecho a vivir en un ambiente sano, el derecho a la salud, a la alimentación, el derecho a la educación, vemos como los niños de la sierra llevan dos años medio recibiendo clases en línea, porque viven bajo la lluvia de balas, mientras huyen para salvar sus vidas siendo criminalizadas por el mismo gobierno”, se lee en el comunicado.

El Centro Morelos explica que muchas de estas familias no pueden regresar a sus comunidades de origen porque “su vida corre peligro”.

De acuerdo con el comunicado, en noviembre de 2018, desplazados de la sierra de Leonardo Bravo, Heliodoro Castillo y Zitlala intentaron regresar a sus hogares, pero sufrieron atentados, sin que el gobierno estatal interviniera para protegerlos.

Ante la falta de apoyo, muchos se establecieron en Chichihualco, esperando ser reconocidos como víctimas mientras que otros decidieron migrar a Estados Unidos en busca de asilo o cruzando la frontera de manera ilegal.

La organización destacó que las condiciones en Estados Unidos no son favorables para los migrantes, quienes enfrentan discriminación, explotación laboral y la incertidumbre sobre la obtención de asilo.

El Centro Morelos llamó a la gobernadora Evelyn Salgado Pineda y a la presidenta de la República, Claudia Sheinbaum Pardo a tomar medidas concretas para evitar nuevos desplazamientos forzados y garantizar una vida digna a quienes han tenido que huir de la violencia.

También urgió a los legisladores federales y locales aprobar un marco legal que proteja los derechos humanos de las víctimas de deportación, tanto en México como en el extranjero.