Bernardo Bravo Rendón, maestro quesero de una tradición familiar en Zumpango
Bernardo participó por primera vez con quesos de hasta un año de añejamiento y de hasta ocho kilos de peso. Se siente orgulloso de seguir con el legado de su abuelo Agustín Bravo y su padre Darío Bravo
Yasmín García. Chilpancingo, 1 de diciembre 2025
Foto: Oscar Guerrero
El maestro quesero, Bernardo Bravo Rendón, ganó el tercer lugar en el segundo concurso de “Maestro Quesero”, “Queso de Cincho”, que se realiza desde hace dos años en Zumpango, municipio de Eduardo Neri.
Bernardo Bravo comenzó a elaborar quesos artesanales desde niño, aprendió de su abuelo Agustín Bravo y de su padre, Darío Bravo.
Todos los días Bernardo ordeña las vacas y elabora el queso en cuajos, manteniendo el proceso natural que comienza con una buena alimentación de las vacas y su esquema de vacunación para tener un producto de calidad.
“El proceso es natural desde el ordeñado de vacas, el cuajo, darle buena calidad, buen sabor para el cliente que tiene el buen gusto de queso”, narró.
Bernardo participó por primera vez con quesos de hasta un año de añejamiento y de hasta ocho kilos de peso.

Explicó que el queso de un año de añejo es seco, por lo que tiene más sabor y su textura es muy seca.
El maestro quesero está orgulloso de su trabajo ya que continúa con el legado de su familia.
“Es algo que has aprendido es un orgullo seguir con el legado de la familia que son maestros queseros, a varios tíos les gusta este trabajo, que es un trabajo dado a conocer y es algo bueno”, manifestó.
Además del queso de cincho elabora queso de aro, de cuajada y requesón.

