GUERRERO

Cocineras tradicionales luchan por no dejar morir sus recetas

En el Primer Encuentro de Cocineras Tradicionales y Mezcaleros, Lilia Maldonado compartió el pozole de camagua, una receta que ya casi no se prepara y, destacó la necesidad de preservar estos platillos


Itzel Urieta. Chilpancingo, 12 de junio 2025

“Nuestra función es rescatar las recetas de las que ya no se están haciendo o las que se están dejando de hacer”, dijo Lilia Maldonado, cocinera tradicional de Chilpancingo.

Lilia participó hace unos días en el Primer Encuentro de Cocineras Tradicionales y Mezcaleros en Chilpancingo.

El encuentro fue organizado por la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (CANIRAC) Chilpancingo, con el objetivo de promover platillos tradicionales del estado, participaron cocineras de varios municipios.

El gusto por la cocina viene de familia, Lilia lleva 18 años como cocinera tradicional, lo aprendió de su abuela, también sus tías y sobrinas son cocineras tradicionales.

Se certificó hace un mes y medio, debido a que era invitada a algunos eventos internacionales y por no tener certificación, muchas veces no las dejaban participar en eventos.

La certificación la realiza la Secretaría de Turismo del estado.

“Hubo la necesidad de reconocernos como cocineras para que también nosotras pudiéramos presentar nuestras comidas y nuestras recetas”.

Uno de los platillos que presentó fue el pozole de camagua, que, de acuerdo con Lilia, es uno de los platillos que casi ya no se consume.

El pozole de camagua se prepara a partir de una mezcla de elote sazón desgranado, hervido junto con frijol negro, a la que en algunas variantes se le añade carne de cerdo o de pollo. Al servirse, se adereza con cebolla picada, orégano y chile de árbol, y hay quienes lo enriquecen aún más con unas gotas de limón o trozos de aguacate.

“En el 2017 se declaró como patrimonio. Ahorita se está promoviendo más porque la gente ya casi no lo hace y no lo consume”, explicó Lidia.

También preparó relleno de puerco, uno de los platillos más conocidos en el estado.

Lo que más le gusta de los encuentros con otras cocineras tradicionales es que conviven y se comparten recetas entre todas.

“Aquí no hay envidias”, aseguró.

Para Lilia, la comida significa un momento de convivencia con la famila y amigos, por lo que considera que es importante preservar platillos.

Invitó a las personas a consumir, conocer y preparar los platillos tradicionales del estado, como el pozole de camagua.

“Que no se pierda la tradición. Degustar un platillo es convivir con la familia, convivir con los vecinos y amigos”.

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